De vuelta a casa

Habia pasado mucho tiempo desde mi apresurada marcha. Esperaba no haber estado fuera tanto tiempo como para ser olvidada.
Dejé caer la pequeña maleta en el suelo y miré a mi alrededor. La cabaña era bastante grande en comparación al último sitio donde habia estado.
-Mírame Dev, lo he logrado. Al fin soy libre.
Me dejé caer en la polvorienta cama y fingí dormir un rato. Pero tenía hambre de nuevo.

Toqué un par de veces a la puerta antes de abrir.
-Menuda choza...Aunque lleva bastante tiempo avandonada...-Dije pasando un dedo por la mesa del salón.

-¿Danny?-Entré en la habitación donde Danae fingia dormir y dejé la bolsa que llevaba sobre la cama.-Te he traido algo de comer. Debe haber sido un viaje duro.Miré alrededor observaando cada detalle de la amplia habitación. Olia a cerrado pero pese a todo podía oler el aroma de la piel de la chica.

-Es curioso...No hueles como una humana.- Abrí la bolsa y le tendí una hamburguesa.

Le arrebaté la hamburguesa de las manos y la devoré como si llevase siglos sin provar bocado. Reí al pensar en que aquello, en cierto modo era cierto.

- Ash dijo que solo será temporalmente. Pronto desaparecerá la influencia de la diosa perro y seré totalmente humana.- Hurgué en la bolsa en busca de algo mas que comer y abrí la taza de café que había en su interior.- Huele bien- Di un pequeño sorvo de aquel caliente líquido que inundó mi boca de un amargo savor.-Delicioso.

Miré a Sin atenta. Parecia preocupado.
-Sabes que ya no tienes porque permanecer aquí. La diosa perro te pidió que te encargaras de la vigilancia de una dark hunter y ya no hay ninguna aquí...--Di otro trago al amargo café- No hay nada que te retenga. Si te quedas, Mephisto te encontrará e irá por ti.

-No deberías llamarla así, bien sabes que no lo soporta.- Dije riéndome de su insolencia.- Ahora cualquiera podría matarte... Incluso ese novio tuyo si tiene hambre. No esperarás que me marche así sin mas ¿no?

Me senté a su lado y le di un leve beso en la frente. Su piel era realmente cálida.
-Mi pequeña Danae...Siempre te he querido, eso ya lo sabes.-Sujeté su cara ente mis manos- No me alejaré de ti mientras piense que alguien puede hacerte daño, no podría soportarlo.

Me levanté algo incómodo y deambulé por la habitación meditando.

-Aunque me duela admitirlo yo no puedo transformarte, deberias hablar con Deviant sobre eso.

-¡NOOO!-Grité haiéndome un ovillo en la cama. -No quiero volver a ser eso. No quiero hacer mas daño a nadie. Nunca más.

-Si ya dañaba antes a los humanos a los que debía proteger solo porque su sangre me fortalecía durante un tiempo...¿En que me convertiría si dependiera de su sangre para sobrevivir? No quiero ser eso...Yo solo...

Sentí la calidez de las lágrimas que caían de mis ojos y quedé atónita al darme cuenta de que por primera vez en mas de un siglo estaba llorando.

-Quiero ver a mi hermano...Lo hice todo por el y ahora... ni siquiera se donde está.

"El nunca regresará". Pensé. "Está condenado".
La abrazé con fuerza sin saber muy bien que hacer. Nunca había visto en ella gesto alguno que indicase debilidad.
Esperaba recibir un golpe tremendo cuando la toqué pero ese golpe nunca llegó, solo me abrazó con fuerza.
-Cálmate pequeña...Traeré a tu hermano del mismísimo infierno si es necesario.-Sujeté su rostro entre mis manos y le dediqué mi mejor sonrisa.-Si algo sabe hacer un Dark Hunter es encontrar a su presa.

Miro al intruso con una mueca de desprecio.
-Hablando de criaturas infernales...-Me levanté alejándome de Danae- Si has terminado de comer tiraré esto- Dije recogiendo los restos de su comida.-Me alegro de ver que has logrado sobrevivir en mi ausencia chico...-Dije con un siseo.

Salí de la habitación maldiciendo a Deviant en voz baja. No debería haber escuchado la conversación.
Estaba seguro de que ese estúpido intentaría buscar a Alex y estaba claro que tarde o temprano sospecharían al ver que no aparecía.


"Se harán preguntas. Descubrirán que yo lo maté. Ella no me perdonará nunca por algo así, aún tratándose de una orden directa."

Regresé a la habitación en cuanto recuperé la calma.
-¿Y bien? ¿Vas a decirnos cuanto rato llevas escuchando a escondidas?-Lo miré con ira todabía con el recuerdo de la calidez que desprendía la piel de Dany.-¿Cuanto has escuchado?
Solo quería saber si había escuchado que Danny hera humana y que se negaba a dejar de serlo.

-¡Dev!- Grité sonrojándome al darme cuenta de que podría haberse llevado una impresión equivocada al verme en la cama con Sin.-Yo...
No me dió tiempo a terminar la frase cuando Sin salió de la habitación.
Tal vez lo halla escuchado todo. Pensé secándome las lagrimas disimuladamente.

-Te he hechado de menos...-Le miré forzando una sonrisa.

¿Como reaccionará al saber que soy humana?

-Siento haberme ido sin decirte nada pero... apenas tube tiempo de hacer las maletas y...-Hasta ahora no me había dado cuenta de lo pálida que hera su piel y debía ser tan fria como la de Sin.-No quería preocuparte. - Me acerqué a el y le di un largo abrazo sin darme cuenta de que estaba temblando.
El recuerdo de los colmillos sobre mi cuello me provocó un escalofrío. El proceso de transformación era lo mas doloroso que había pasado.
La sola idea me horrorizaba. No hera posible.
¿Podía sentir miedo de la persona a la que amaba?.

Aproveché el regreso de sin para apartarme un poco disimuladamente.

-Está bien.-Dije con una sonrisa de fingida cortesía.- Solo pregunta y yo te contaré todo lo que esté en mi mano.

No pude evitar sentir una punzada de celos al ver la muestra de cariño de Danae. Hace tan solo unos segundos era yo quien la tenía entre mis brazos.

El me la había arrebatado. Como lo había intentado hacer Alexander unos meses antes.
"La matarás si sigues cerca de ella. Y morirás tu también." Había dicho. "No debes relacionarte con otros Dark hunters. Son las reglas." La voz de Alexander resonaba en mi cabeza.

Ella ya no es una de los nuestros Alex...Y tu tan solo eres un mero recuerdo.

-La última vez que le vi fuen en una reunion en Katoteros. Alexion nos llamó porque había tenido una visión. Hay traidores entre nuestros hermanos...Bebedores de sangre.-Lancé una mirada incómoda hacia Danae sabiendo que ella había sido una de ellos.

-Los traidores tenían que ser eliminados esa era nuestra misión pero Artemisa decidió que prefería a Danae como humana. No se que planes tenía pero Aqueron no debía saber bajo ningún concepto que seguía viva. Alexander debía cazar a algunos dark hunters y dar aviso tras hacerlo Pero no lo hizo.-Le miré con una sonrisa fría- Siento no poder darte mas información pero estaba demasiado ocupado devolvieéndole el alma a tu novia.

No le había dicho nada que no fuese verdad, solo le había ocultado que Dark Hunter lo había matado. El permiso de Artemisa para cazar a sus hermanos había sido la excusa perfecta.
Había invalidado la regla que dictaminaba "cualquier daño que causes a un DH lo sentiras 10 veces mas"

Ahora estaba segura. Su hermano estaba muerto.
El siempre informaba a sus superiores de sus misiones. Había sido responsable desde niño.
Si siguiese vivo hubiese informado de su situación. Alguno de los dark hunters debía haberlo vencido. Kyron era muy fuerte igual que Zarek.

Los ojos se le inundaron de lágrimas nuevamente pero esta vez no fue por tristeza. Al escuchar ese nombre un dolor agudo había azotado la cabeza de Danae como un látigo. Algo estraño ocurria.

-Sin...-Dije cuando pude recobrar el aliento-¿Quien demonios es Aqueron?

-Es solo el perro de Artemisa. Nadie importante.-Mentí-.Pareces cansada. Deberías tratar de dormir..

Miré a Deviant esperando que se marchara.

-Se hace tarde chico.

-Sin...-dije tratandó de controlar las ganas de abofetearlo.- Deja de asustar a Dev, nadie me persigue.-Miré a Devian con una sonrisa tierna-Nadie va a intentar matarme. Si Artemisa hubiese querido eso se hubiese encargado cuando no tenía alma. Seia un destino mucho peor.-Me levanté y detube a Dev antes de que saliera- Son solo imaginaciones de Sin. No le hagas caso. No será necesario que nadie haga guardia en mi puerta.
Miré a través de la ventana y me encontre con la dorada mirada de un gato.
-Avinagrado!-Gritó con una expresión de alegría-Hacia meses que no...
Antes de terminar la frase ya estaba fuera de la casa, en busca de aquel que habia sido mi compañero de caza durante muchisimos años.

Abrazé al pequeño demonio de pelaje azulado, pero el no se movía, no decía nada. ¿Que le ocurria? Ya debería estar quejandose.
"Hueles delicioso...Danae la humana" Dijo al fin, un segundo antes de lanzar un arañazo a mi pecho.
Aparté al gato de un empujón y llevé la mano a la herida mientras miraba al demonio adentrarse en el bosque.
¿Por que?
La sangre brotaba con fuerza de la profunda herida.
¿Porque habie hecho eso Avinagrado? El siempre habia sido leal.
"Lo era, mientras te temía". Se contestó a sí misma.

-Maldita estúpida...-Rugí mientras corría hacia donde estaba Danae- Te dije que tubieses cuidado. ¿Que esperabas que iba a pasar eh? ¿Creías que ese demonio te respetaría aún siendo humana?

Me quité la camiseta y tapé la herida. El olor a sangre era insoportable, pero no podía morderla, no lo necesitaba y lo tenia rotundamente prohibido.

-Siento haberte gritado...-Miré la camiseta que se teñia rapidamente de sangre-Estás perdiendo mucha sangre. Tienes suerte, Kuro n ha querido matarte. De haberlo hecho no podriamos salvarte.

La agarré en brazos antes de que tubiese tiempo a reaccionar y la llevé dentro de la cabaña

-Ya sabes que hacer, ¿verdad?- Pregunté a Deviant mientras dejaba a Danae sobre la cama y retiraba la camista de la profunda herida.-Se desangrará si no la ayudas...

Me aparté despacio y miré a Dev con gesto amenazador mientras sacaba una estaca de un bolsillo de mis pantalones.

-Y no te pases o te juro que te estaco.

"¡NO! "Queria gritar, pero apenas un gemido salió de mis lavios. No quería volver a ser un monstruo, no queria volver a matar a nadie. Todavía recordaba el proceso de transformación. La adaptación, el hambre. Esta vez solo yo misma me prohibiría dañar a los humanos.
A mi cabeza llegaron recuerdos de todas las personas a las que había matado, recordaba cada nombre aunque fuesen asesinosy violadores.
"No te justifiques" Pensé, yo era tan horrible como ellos después de todo, había jurado proteger a los humanos pero no era mas que una asesina.
Había asesinado a mi hermano.
Todos estos pensamientos hacían que me olvidase del dolor, solo esperaba no ransmitirle a Dev el odio que sentia hacia mi misma.
Alejé todos eso pensamientos de mi cabeza y me centré en la imagen del dia que me lberé de las garras de Artemisa. Aquella tranquila playa, con el calor del sol acariciandome.
Seguro que esa bruja pelirroja se estaria burlando de mi en este momeno.

Tan poco duró el sueño...

Un gruñido de frustración llenó la garganta de Sin.
-Tengo trabajo me temo, alguien tiene que cuidar de los humanos...-Le di un beso en la frente a Danae y agradecí notar su calidez- Cuídala, si le pasara algo...-No terminó la frase, pero la angustia se reflejaba en sus ojos a pesar del tono de ira de su voz.

Salí de la cabaña maldiciendo la presencia de demonios en alquel lugar. No le gustaba la idea de dejarlo con ella a solas.
"No es tuya" Dijo un voz en mi cabeza. ¿Mi consciencia tal vez?.
-Cállate, eso aún no está decidido...

Recordó a Kyrian y lo que decía siempre sobre las mujeres: " Nada está perdido hasta que dice si quiero y ni aún así nada es decisivo"

No iba a rendirme tan pronto. Estaba seguro de que ese idiota no aguantaria a un novia humana. Tarde o temprano supondría una carga.

-No lo has... hecho...-Dije ál despertarme- ¿Por que?

Aún no había habierto los ojos pero sabía que esba ahí. No sabría como explicar como exactamente. Cuando estaba cerca sentiía la sensación de estar en el borde de un acantilado; podía caer en cualquier momento pero me negaba a abandonar mi puesto. Las vistas son bellas desde aquí.

Me incorporé y observé el camisón de encaje empapado de sangre y rasgado por las garras de Kuro.
-Tendré que tirarlo...Avinagradó me las pagará por esto...-Dije como si fuese lo único que importara.

Después me levanté sin más y abracé a Dev
-Gracias por no hacerlo. Quiero hacer algunas cosas antes de volver a ser...inmortal.-Lancé un suspiró.-Se que tarde o temprano tendré que dejar que lo hagas y no me importará convertirme... Pero aún no es el momento. -Le di el beso que no me había atrevido a darle antes. Ya no le temía.-Quiero vivir solo un poco mas.

-Yo... no quiero morir como humana.

No había pensado en ello. Crecer, envejecer. Todo lo que la aterrorizaba cuando era humana. Casarse.
No huebiese podido aunque la idea le hubiese gustado. Su padre la vendió mucho antes. Nunca le había contado aquello a Alexander.
A el nunca le había hecho nada, nunca le había tocado.
Si su hermano se hubiese enterado a tiempo ella posiblemente hubiese muerto en aquel antro. No hubiese soportado aquello.
La vida de los humanos hera injusta. Eran débiles, vulnerables, en ocasiones eran ellos los auténticos monstruos.

-Solo quiero unos dias mas... -Me tumbe en la cama haciendo caso omiso del camisón roto-Quiero ver la ciudad una vez bajo la luz del sol y...-El color subió a sus mejillas avergonzada de lo que estaba a punto de decir.
Otro sentimiento humano, tan inútil pero encantador.
-Yo...quiero sentirte mientras todabía sea... cálida. ¡Pero no hoy claro!-Me precipité agitando las manos nerviosa.
"Cálmate, cualquiera diria que eres virgen" pensé.
-Esta noche solo quieo abrazarte si no te importa... me ayudaría a dormir tranquila...